Dime como te mueves y te diré lo sostenible que eres

La responsabilidad de conseguir un mundo sostenible no solo es tarea de los grupos sociales que tanto tiempo llevan luchando por ello; ni tampoco de las grandes cumbres –a Río + 20 me remito - , sino también de cada uno de nosotros, en tanto en cuanto somos ciudadanos, peatones, conductores, consumidores, usuarios, profesionales, etc.

Está múltiple personalidad nos permite movernos en ámbitos diferentes. En todos ellos, somos, estamos y nos trasladamos. La elección del medio a través del cual se lleve a cabo esta última acción verbal, no es banal.

A favor de una movilidad sostenible se organizaron en Vitoria, actual capital verde europea, hasta nueve actividades en un mismo día, con motivo de la Semana Europea de la Movilidad, del 18 al 22 de septiembre. Quizá no sea más que un cambio de sentido. La clave puede ir por someterse a tratamientos de desintoxicación de una adicción peculiar: el uso abusivo del vehículo a motor. Veáse, una apuesta decidida por la bicicleta, los patines, o los propios pies. Y también por el teletrabajo, la flexibilidad o la eliminación constante de barreras arquitectónica.

Responsables de llevar la sostenibilidad donde estemos, siendo lo que somos y yendo donde vayamos, un año más toca (re)pensar cómo hacemos cuando nos trasladamos: Dime como te mueves y te diré lo sostenible que eres.

La comunicación interna como generadora de credibilidad y compromiso

La semana pasada tuvo lugar en Madrid una nueva jornada Corresponsables bajo el título 'La importancia de la comunicación interna para generar credibilidad en las actuaciones responsables'. Como su propio nombre indica, el encuentro sirvió para poner de manifiesto la necesidad de articular eficaces estrategias de comunicación interna a la hora de informar a los empleados sobre la actuación de una organización en materia de Responsabilidad Social Corporativa o Sostenibilidad.  Cuando hablamos de comunicación interna en asociaciones o entidades de otro tipo, estamos hablando asimismo de la comunicación que se establece con los asociados, miembros o socios de la entidad. Todos ellos, ya sean empleados o socios, son los verdaderos embajadores de nuestras marcas, tal y como señaló Marcos González, director general de MediaResponsable, y por tanto, son los primeros a los que deberíamos mantener perfectamente informados de todo cuanto se cuece en nuestra entidad.

La veracidad, la coherencia, la continuidad, el compromiso, la honestidad, la transparencia, la humildad y la participación son algunos de los ingredientes que debe incluir el cóctel de la comunicación interna si realmente queremos establecer relaciones basadas en la credibilidad y el compromiso; lo que nos permitirá, a su vez, transmitir esos mismos valores fuera de la organización de una forma reforzada.  De hecho, según datos del último estudio elaborado por el Observatorio de Comunicación Interna e Identidad Corporativa sobre 'Redes Sociales, Social Media y Entornos Digitales en Comunicación Interna', aquellas organizaciones que han implantado efectivamente el Social Media en su protocolo de comunicación interna, están experimentando significativos beneficios, por ejemplo, a la hora de conseguir una mayor difusión de la información corporativa.

De poco sirve, por no decir nada, que una organización haga muy bien las cosas si no tiene a sus públicos más cercanos involucrados en el proyecto. Además, como resaltó Larry Parnell en su conferencia 'New developments and Trends in Sustainibility Communications', si el contenido de nuestras comunicaciones tiene que ver con lo que hace la entidad en materia de RSC/Sostenibilidad, ello nos ayudará a incrementar nuestra capacidad para atraer, motivar y retener a colaboradores, empleados y asociados, a partir de la generación de orgullo de pertenencia y engagement, aspectos de naturaleza intangible pero que, según los expertos, pueden tener un impacto relevante en los índices de productividad y competitividad de cualquier organización.

Pon un laboratorio de ideas en tu colegio profesional

Reflexionar sobre la función de la profesión, sobre la función de la institución. (Re)pensar enfocando en otros contextos, presentes y futuros. Proyectar. Innovar. Abrir el código. Ese es el espíritu que ha poseído a algunos colegios profesionales, como el COAM y su Madrid Think Tank, de un tiempo a esta parte. Porque, tal y como recordábamos hace unos meses en el artículo Organizaciones mutantes, innovación en constante evolución, hay que...

... obligarse a ver más allá de lo inminente; trabajar en el largo plazo; preguntar a todos aquellos que forman tu organización por cómo ven el futuro y qué harían para hacerlo realidad. En definitiva, cultivar la «visión innovadora» de una organización. Para que esto sea posible, es necesario un tiempo y un espacio dedicados a analizar el presente y proyectar el futuro, y unas herramientas.

 A colación de esto último -visión innovadora y herramientas- Unión Profesional y la Escuela de Organización Industrial (EOI) están preparando la segunda edición del Programa de Desarrollo Directivo en Colegios Profesionales. Porque, antes de poner un Laboratorio de Ideas en tu organización, es interesante que aquellos que trabajan en ella cultiven una mirada innovadora. Para sacarle todo el partido a las oportunidades que ofrece el sector colegial y repensar las instituciones hay que formarse para el futuro. Esto es lo que propone el Programa, único en su especie, de UP y EOI.

Entendemos que, para ver más allá, hay que tener muy claro de dónde partimos, qué posibilidades tenemos y cómo podemos ampliar el campo de batalla. Estar preparado no es optar por la ventaja. Formarse para el futuro está íntimamente ligado al sentido de la responsabilidad. Profesional.

Concienciación científica

«No se trata únicamente de reivindicar y quejarse, sino también de aportar, de manera constructiva, plantear alternativas y participar activamente en la vulgarización de su trabajo». Así culmina el artículo que en el último número de la revista Profesiones escribe Ester Artells, portavoz de la Federación de Jóvenes Investigadores (FJI)/Precarios. Lo hace con la voluntad de evitar  caer solamente en obviedades como la falta de financiación en el ámbito de la I+D+i.

Está claro que, tal y como también advertía en otro de los artículos que recientemente se publicaba en Profesiones, Manuel Regueiro, secretario general del ICOG, la reducción en el esfuerzo de inversión generará un desastre a medio, y sobre todo, a largo plazo. Regueiro plantea la posibilidad de incluir la I+D+i entre los sectores prioritarios de la economía, «permitiendo así una oferta de empleo público y posibilidades de contratación en organismo públicos de investigación, universidades y centros tecnológicos».

Resumiendo: Concienciación ante los recortes en investigación y desarrollo, concienciación científica como antídoto a esta marea de ajustes que lleva tanto tiempo tocando a aquellos sin los que el futuro podría no serlo.

Renovados por dentro y por fuera

'Innovar para avanzar'. Este es uno de los lemas que contiene el vídeo de presentación de la nueva identidad corporativa del Consejo General de la Abogacía Española lanzada el pasado julio. Y es que aunque no son buenos tiempos para casi nada, las organizaciones colegiales, instituciones y empresas no cejan en su empeño de modernizarse y adaptarse a los nuevos tiempos mediante la renovación de lo que es su cara hacia el exterior, su identidad corporativa, conscientes de que a través de ella, y su correspondiente implementación en los diferentes materiales (la página web como principal estandarte), se proyecta la imagen de la organización y, por ende, el alma de la misma.

Junto a la Abogacía, son muchos los consejos generales y colegios profesionales que ido abandonando poco a poco los tradicionales escudos en busca de símbolos más modernos pero que reflejan la esencia de cada uno. Así, nos encontramos con una renovada imagen del Consejo General del Trabajo Social, del Consejo General de Ópticos, o de la Unión Profesional de Canarias, sin olvidar al Consejo de la Ingeniería Técnica Industrial quienes hicieron este ejercicio hace alrededor de año y medio... Todos ellos muestran ahora en la red una cara más actual, acorde al cambio que están experimentando en sus diferentes 'casas'. En definitiva, renovados por dentro y renovados por fuera.

Sostenibilidad (profesional) para todos

Como viene siendo habitual cada dos años, las energías medioambientales se unen en un mismo espacio: el Congreso Nacional de Medio Ambiente -CONAMA-, cuya undécima edición se celebra la última semana del mes de noviembre.

Unión Profesional participa de nuevo. Miembro de la Fundación Conama desde sus inicios, en esta ocasión dedicará su actividad especial a la cooperación que desde las instituciones colegiales se lleva a cabo a favor del desarrollo sostenible. Para ello, el protagonismo será compartido, pues dichas instituciones aportarán aquellas organizaciones y fundaciones creadas a partir de su esfuerzo, muchas de las cuales conocemos por el especial que tanto la revista Profesiones como Canal Profesiones hace algunos años las dedicó.

El objetivo principal: reconocer la labor que desde el ámbito de las profesiones colegiadas llevan a cabo tanto en España como fuera de nuestras fronteras en pro de una sostenibilidad para todos.

Más información... próximamente!

Crecimiento profesional

Hay lugares donde se prohibe terminanteme mencionar la palabra CRISIS. Lo he visto en las noticias. Por suerte, el optimismo se contagia a la misma velocidad que el pesimismo. Entonces, ¿por qué no optar por la primera opción?. Eso han debido pensar en algunas altas esferas europeas cuando han decidido, muy a regañadientes, cambiar de discurso, olvidarse de la insistencia en la austeridad y convencer al decaído ciudadano europeo de la posibilidad real de crecimiento.

Las profesiones, con la teoría más que aprehendida, ponen en práctica métodos, instrumentos, maneras de hacer crecer la economía: proponiendo empleo y también empleabilidad, apostando por el desarrollo profesional continuo, por la creación de ideas, y en definitiva, por la sociedad civil. Con las energías recargadas, hagamos un poder y fijémonos, aunque cueste, una meta optimista, siguiendo, por qué no la senda del crecimiento profesional.

Nuevos códigos para nuevos tiempos

La deontología profesional ha trascendido los muros de las profesiones para ser debatida y analizada en las universidades (tanto en la de Alcalá de Henares como en Alicante se han celebrado encuentros entre docentes, estudiantes y representantes de colegios profesionales) e, incluso, en las redes sociales, a través de campañas de comunicación como la lanzada por la Organización Médica Colegial (OMC) a principios de año con el ánimo de difundir su nuevo Código Deontológico que, precisamente, ahora cumple su primer año de vigencia, como bien explica el presidente de la OMC, Juan José Rodríguez Sendín, en www.medicosypacientes.com.

Pero los médicos no son la única profesión que están de estreno −en lo que a código deontológico se refiere− sino que los Dentistas también aprobaron la actualización del que rige su profesión a  mediados del pasado junio, incorporando como novedad principal el hecho de que los ciudadanos puedan presentar en cualquier colegio oficial sus dudas, reclamaciones o litigios relacionados con el ejercicio profesional odontológico para que los colegios profesionales actúen como mediadores, adaptándose así al Real Decreto Ley 5/2012 de 5 de marzo de mediación en asuntos civiles y mercantiles.

También en el mes de junio, el Consejo de Trabajo Social acogía un nuevo código deontológico de la profesión tras tres años de intenso trabajo de la Comisión de Expertos formada para llevar a cabo la adaptación de las normas deontológicas a las nuevas realidades sociales, a los nuevos usos de las tecnologías de la información y la comunicación y a las nuevas circunstancias legislativas del siglo XXI, tal y como figura en su nuevo texto.

Si la sociedad evoluciona, la profesión también debe hacerlo, y prueba de ello es esta adaptación de las normas emprendida desde las profesiones para guiar el ejercicio de sus profesionales ante los retos actuales con el claro objetivo de continuar garantizando a la ciudadanía unos servicios de calidad, lo que al tratarse de nuestra salud, la gestión de nuestros bienes o nuestra propia seguridad o integridad física, resulta fundamental.

Transparencia entre todos... y para todos

Más de 5000 grupos de interés en un año. Es la asombrosa suma (in crescendo) que ha alcanzado el Registro de Transparencia Común de la Unión Europea desde que celebramos su nacimiento, el 23 de junio del año 2011. Ya antes hubo otros Registros de Transparencia a nivel comunitario, pero este viene marcando importantes diferencias que, de momento, nos hacen augurarle un éxito del que sus predecesores no pudieron disfrutar. Y no lo dicen solo las cifras, sino que también lo corroboran las actuaciones que desde las instituciones europeas se están emprendiendo para su consolidación.

La última, la consulta pública que lanzaban al principio del verano con el objetivo de recoger datos para la preparación de un informe anual en el que se analice su evolución. Se trata de una labor de retroalimentación, de colaboración, de seguimiento... de continua revisión que muchos consideramos esencial para garantizar el buen funcionamiento de cualquier herramienta. Este Registro es una apuesta por las políticas de transparencia inherentes a una sociedad abierta y responsable que prefiere adelantarse en el ejercicio de sus responsabilidades y comprende la importancia de la publicidad entendida a la Bentham: hacer público aquello que hacemos/somos como garantía para el ciudadano.