miércoles, 17 de julio de 2013

COmencemos por el COworking

Siempre me gustó mucho más la palabra colaboración que comparación. Y eso que las dos tienen el mismo comienzo y el mismo final. La parte del medio, como sucede con el dichoso 'término medio' es definitiva.

Curiosamente colaboración comparte también comienzo con colegio (profesional). Y de esto va la nueva iniciativa del Colegio Oficial de Geólogos (ICOG). Esta institución ofrece dentro de su sede central en Madrid un espacio destinado al (de nuevo, el mismo comienzo): coworking. De este modo, profesionales
de ciencias podrán beneficiarse de un espacio para trabajar y así compartir proyectos y aprovechar sinergias.

Los colegios profesionales han visto en la posibilidad la oportunidad precisa para el desarrollo de sus profesionales mediante esta práctica ya muy habitual tanto en grandes como en pequeñas ciudades. Así se exponía en la revista Profesiones 143.

A propósito del coworking el ICOG se pronuncia y comenta que «refuerza la sensación de espíritu comunitario y permite reducir los gastos mensuales por alquilar una oficina convencional». Comencemos a convencernos:

viernes, 12 de julio de 2013

Concluyendo el "Inicio"


Sobre cómo inspirar, cómo hacer llegar la esperanza en un futuro que es presente y, sí, la importancia de la responsabilidad del profesional. Deontología, formación continuada, búsqueda constante de lo que te define, aquello que te motiva, siempre en abierto, innovando y enfocando. El futuro que es presente. Manos a la obra.

En la clausura del Programa de Inicio Profesional, el presidente de Unión Profesional (UP), Carlos Carnicer, habló de "buscar en la profesión un medio de vida" pero, sobre todo, "algo que os guste" siendo siempre muy conscientes del "privilegio", del "contexto ventajoso que da haber nacido en esta sociedad, pues se ha de devolver una parte de lo que ésta os ha dado". Apeló Carnicer a la lucha por la igualdad, recogida en la Declaración de los Derechos Humanos, y a la unión fraternal entre las profesiones. Un necesario "compromiso social", subrayó el presidente de UP, "que abarca todos los ámbitos de la misma".

Diez alumnos en la Escuela UP de Verano. Cuatro intensos días para inspirar cómo proyectar su futuro profesional. Y, en este blog, unas cuantas reflexiones al respecto.

jueves, 11 de julio de 2013

Atrévete a descubrir TU Marca Personal

Aunque pareciera que la crisis nos hubiera arrancado incluso parte de la memoria, cuando nos esforzamos podemos recordar la época de la que venimos: la del éxito rápido, la de venderse por y para todo, la del porque yo lo valgo.

Ayer, Andrés Pérez Ortega, en el Programa Inicio Profesional de la Escuela de Verano de Unión Profesional, nos devolvió no una sino muchas veces a la cruda pero también moldeable realidad: «No se puede NO tener una marca personal», pero no ya por uno mismo, sino por aquellos a los que en definitiva debemos beneficiar, a los demás. De eso se trata, de «conseguir que la gente se beneficie de lo que tu haces». Por eso ya no merece la pena venderse, sino vender lo que haces.

Para ello, como para todo lo que supone evolucionar, hay que romper esquemas, «planteándose de una nueva manera la relación entre la empresa/organización y el profesional». Y de ahí al neoprofesional, solo hay un paso, pero claro, hay que darlo.

A esto ayuda descubrir la marca personal que todos llevamos dentro, aquella que es «útil, fiable y visible». Estamos a tiempo de cambiar las cosas. De moldear la realidad que nos ha tocado en suerte. Esta es la sensación que los alumnos de esta primera edición del Programa Inicio Profesional se llevaron a sus casas, tras la sesión impartida por quien introdujo el concepto de marca personal en nuestro país.

Después de centrifugar, la lavadora avisa: es el momento de extraer el contenido... No dejemos que se tueste bajo este sol abrasante y recojámoslo antes de que se quede rígido.

miércoles, 10 de julio de 2013

La esencia de las profesiones



En muchas ocasiones, cuando se abordan cuestiones especialmente difíciles de entender, conviene remontarnos a lo más simple para, a continuación, ir avanzando poco a poco hacia consideraciones más complejas. Esto es precisamente lo que hizo la profesora Hilda Garrido a la hora de explicar la deontología profesional al grupo de jóvenes que están cursando ‘Programa Inicio Profesional’ de la Escuela de Verano de UP.

Para empezar, planteó una cuestión de apariencia sencilla: ¿qué es un profesional? Sin ánimo de confundir el ‘ser’ con el ‘debería ser’, ni el sustantivo con el adjetivo, los tres rasgos principales de un profesional son:
  •         Responsabilidad personal
  •     La vinculación a través de la confianza
  •     La adscripción a determinadas normas específicas

A estos rasgos se podría añadir la intelectualidad (frente al carácter más técnico de los oficios) y la importancia de los bienes que protege o maneja ya que, como ocurre en la mayoría de las profesiones colegiadas, se trata de los derechos fundamentales de las personas.

Este último rasgo relativo a los bienes manejados nos conduce al concepto en cuestión: la deontología profesional. Después de analizar con la profesora Garrido varias definiciones, se llegó a una más clarificadora: el conjunto de normas (no de carácter técnico) que han de regir el ejercicio de un profesional con el fin de proteger a los usuarios de sus servicios y que, además, da lugar un régimen sancionador.  Dado que se trata de profesiones con alta implicación en el interés general, se habla de ética pública frente a la ética privada que rige el ámbito privado y que es un ejercicio de independencia moral. De ahí que la deontología sea, recogiendo sus palabras, una ética pública que se aplica al ámbito profesional, tal y como quedó de manifiesto en el coloquio celebrado algunos meses. Ahora, Hilda Garrido, coordinadora también de la Cátedra de Ética de la Empresa y de las Profesiones en la Universidad Carlos III de Madrid, nos habla en primera persona sobre la importancia de la deontología profesional en el siguiente vídeo.

Antes de terminar su ponencia, la profesora Garrido recomendó a los alumnos conocer su profesión (más allá de lo que puedan haber aprendido en la universidad) y ver qué normas (en forma de "código deontológico") tienen que respetar para que a la hora de ejercer puedan prestar sus servicios con pleno conocimiento y garantías. Un ejercicio de futuro, de camino a la excelencia.

Hibridar(te) profesional-mente


"No es trivial este asunto de las diferencias y fusiones entre la afición y el trabajo, asunto también del tiempo propio y de lo que en él hacemos, de los nombres y máquinas que en él manejamos, y de las posibilidades que esos nombres y máquinas abren o niegan. Esa vana costumbre que nos inclina(ba) a ese aparato, a esa centralidad o a esa esquina.

No lo es, en primer lugar, porque la tradición de las tareas asociadas a determinados espacios está siendo transgredida hoy con las redes, fusionando muchos de estos límites y difuminando aún más las diferencias entre afición y trabajo. No es trivial porque la afición cuando ha sido tecnológica y creativa nos habla del singular recorrido de quienes hoy acumulan el poder en Internet, de muchas maneras también el poder en el mundo. (...) La localización de la topía creativa está siendo parcialmente transgredida por Internet y con la erosión de las dicotomías trabajo y ocio, profesión y afición, pero también con la que contrapone lo público a lo privado, transformando la visibilidad y el destino potencial de cada práctica."

Remedios Zafra en (h)adas (Páginas de Espuma, 2013)


La circulación de las ideas y de los propios "actores-red", más allá de las instituciones. Ida y vuelta: De la carne a la virtualidad, y viceversa. El individuo como nodo de una red. Las redes como potencial de multiplicación del valor -siempre y cuando éstas se abran, se crucen; sean abiertas-. Y así logren convertir un colectivo en un cuerpo autorregulado. ¿Cómo? Creando conexiones entre mundos desconectados.

Ideas fuerza sobre las redes, extraidas de la sesión de Antonio Lafuente en Escuela UP de Verano.


"Queremos que nos escuchen, que nuestros usuarios sean proactivos y, para eso, tenemos que seducirlos con nuestra mejor carta y nuestros recursos reales: el conocimiento profesional, la memoria compartida, la experimentación conjunta, la reflexión y el análisis; los debates, la denuncia, el cuestionamiento de las normas, el intercambio de métodos, la experiencia."


martes, 9 de julio de 2013

En muchos lugares donde nadie la espera...

Alguien que además de investigador de ciencias humanas y sociales en el CSIC, dirige un laboratorio de procomún, dice cosas como estas: «hay que permitir a las organizaciones convertirse en red; pasar de ser 'gente rara' a ser 'gente enredada'». El es Antonio Lafuente y el lugar donde he escuchado esta verdad («las ideas son verdad porque circulan») es el Programa Inicio Profesional, de la Escuela de Verano de Unión Profesional.

Invitado para impartir una sesión sobre innovación, Lafuente ha despertado en las mentes de los alumnos apuntados a este curso una curiosidad especial al hablar de un nuevo tipo de i minúscula, la exnnovación. Es decir, aquella innovación que se apellida: oculta, abierta y social. Porque la innovación «no es necesariamente vertical ni tampoco necesariamente en ella deben estar involucrados expertos»; se trata de profundizar más y llegar a un concepto mucho más de andar por casa, cercano a las comunidades, al pensamiento abierto y colaborativo, pero también a la resilencia.

Estemos despiertos a todo lo que nos rodea porque «la innovación puede estar en muchos lugares donde nadie la espera». Más sobre la sesión en Canal Profesiones:




lunes, 8 de julio de 2013

Fomentando el empleo y la empleabilidad de los recién licenciados o graduados


Julio es el mes de los cursos de verano. Desde universidades, escuelas y organizaciones de todo tipo se aprovecha el último empujón previo a las vacaciones para proponer programas formativos de carácter intensivo y dirigidos a todo tipo de públicos.

Este año, Unión Profesional ha querido focalizar sus esfuerzos en aquellos jóvenes que acaban de licenciarse o graduarse y se enfrentan a un mercado laboral que vive sus horas más bajas. Con el ánimo de apoyarles en este momento crucial de sus vidas pero, a su vez, conocer también sus inquietudes, surge el 'Programa de Inicio Profesional' que ha dado comienzo esta mañana en la sede del Colegio de Ingenieros Técnicos de Obras Públicas en Madrid.

En la inauguración, Miguel Fernández Rañada, profesor y consultor, animaba a los jóvenes a no caer en la desesperanza y a abordar el futuro con ilusión porque, como afirmó, "estamos en un cambio estructural; si lo hacemos medianamente bien, estoy seguro de que el futuro será mejor". Desde su experiencia, el profesor Fernández Rañada compartió con los alumnos 7 consejos para manejarse en el "turbulento río" que es el desarrollo profesional:

  1. Las reglas del trabajo son diferentes a las de la universidad, por ello, hay que empezar "de cero", con humildad, escuchando y aprendiendo; y, por otro lado, hay que entender dichas reglas (importancia de las relaciones, del saber estar, del saber cuándo hablar...).
  2. Conócete a ti mismo: cada uno debe conocer cuáles son sus puntos fuertes para poder enfrentarse a un trabajo. Para ello, recomienda: auto-observarse y escuchar a quienes te conocen y cuya opinión merece la pena. Y ante los puntos débiles: controlarlos y tratar de rodearte de gente fuerte en esos aspectos.
  3. Gestión emocional: resulta esencial controlar las emociones para que no lleguen a dominarte.
  4. Perseverancia: hay que perseguir las metas. "Más consigue el que quiere que el que puede", dijo Rañada. Eso sí, sin esfuerzo no hay meta que se consiga.
  5. El talento en equipo: el talento individual ha dejado de ser rentable, ahora se trabaja en equipos (de trabajo, virtuales...), de ahí la importancia de las relaciones y del networking.
  6. La globalidad ha venido para quedarse: hay que encajar las diferencias culturales, cómo se negocia y se trabaja en otros entornos. La internacionalización se ha convertido en un eje estratégico para todos.
  7. Impacto social del trabajo: hay que ser conscientes del impacto social que tiene lo que hacemos. "Podemos hacer que nuestro trabajo sea una herramienta de progreso social", afirmó. Pero para que esto ocurra se debe trabajar desde el 'que' pero también, y sobre todo, desde el 'como'. En su opinión, "no se trata de trabajar mucho sino de hacerlo inteligentemente, teniendo en cuenta el que y el como, así como con un espíritu de mejora continua".
En la entrevista que se realizó al término de su conferencia para el canal de UP en YouTube, el profesor profundiza un poco más en algunos de estos consejos.