miércoles, 30 de junio de 2010

Lobbies: coautores de mensajes políticos

Como todo en la vida, algo puede ser bueno o malo según el prisma bajo el que se mire. Esto es lo que ocurre, por ejemplo, con los lobbies o grupos de presión, como se suele traducir a nuestro idioma. En el II Ágora de la Comunicación que se celebró ayer en el auditorio de Mutua Madrileña de la mano de Dircom y MasCuota, hemos podido debatir sobre Comunicación Política y sobre la actividad de los lobbistas. Ha sido María Rosa Rotondo, presidenta de la Asociación de Profesionales de las Relaciones Institucionales (vamos, la asociación de lobbistas españoles, como ella misma ha especificado al comienzo de su intervención) la encargada de señalar los retos que los profesionales a los que representa poseen de cara a convertirse en coautores de los mensajes políticos. Pero, ¿cómo conseguirlo? Según Rotondo, mediante el registro, la transparencia y la profesionalización, elementos capaces de generar confianza, algo bastante demandado en los tiempos que corren (pero que, en el caso de nuestra selección de fútbol, parece que no carecen de ella como no paraban de repetir ayer los entregados comentaristas)... Supongo que, una vez que estos retos sean cada vez más una realidad en nuestro país, la percepción negativa de los lobbies como sujetos que defienden intereses particulares por encima del todo y de todos irá poco a poco dejando paso a una concepción más positiva que los concibe como el modo de proporcionar conocimientos expertos específicos en sectores económicos, sociales, ecológicos, científicos y de toda índole (definición del Parlamento Europeo).

No obstante, siempre habrá a quienes les venga muy bien ampararse en las imágenes más peyorativas de distintos agentes de la sociedad civil para justificar unos argumentos que más que liberalizadores adquieren tintes radicales fuera de cualquier planteamiento democrático.

Y hablando de transparencia, permitidme traer de nuevo a nuestro blog el concepto del Open Government que tanto facilitaría la labor de los lobbistas y permitiría, sin duda, incrementar el grado de confianza de las administraciones públicas. Y esto ya no es solo cosa de Estados Unidos y Reino Unido sino que en nuestro país ya hay algunas administraciones (como Asturias y País Vasco) que empiezan a hacer sus pinitos.

jueves, 24 de junio de 2010

Palabras estrella en un cielo enmarcado

“Cuando le pido a una palabra que haga trabajo de más”, dijo Humpty Dumpty, “siempre pago un extra”. Las palabras, bien lo sabía Lewis Carrol, pueden jugar con nosotros si nosotros no jugamos con ellas. Palabras clave, palabras estrella, palabras que funcionan el doble si las combinas bien. Por ejemplo, en el Scrabble de la comunicación, qué vale más: ¿un profesional o un colegiado? George Lakoff, lingüista y analista político, avisa a navegantes: “Si el lenguaje está alejado del proyecto, solo estamos contando mentiras”. Dicho de otra forma, para que el discurso cale debemos escoger las palabras que se adecuen a nuestra escala de valores. Como recordó Lakoff a su paso por nuestro país, la razón poco tiene que ver con la comunicación. La inconsciencia reina; es por esto que “hay que enfocar en las emociones”, apelar a la empatía, pisar el asfalto y ablandarlo. El lenguaje da de comer a los marcos; refuerza el contexto, le da forma y lo mantiene. “La realidad no es. La realidad se construye desde el lenguaje”. Esta es la certeza que ha de empujarnos a ejercitar un discurso que apele a la empatía; ésta activará tanto el sentido de la responsabilidad como el principio de excelencia personal. Y es que, conseguir este grado de compromiso es capital. Sin él las dos misiones del Colegio Profesional se diluyen, pierden fuelle. ¿Qué dos misiones? Las mismas a las que debería aspirar cualquier gobierno democrático: la protección y el empoderamiento de la ciudadanía. Porque sin protección no hay seguridad y sin educación los potenciales se estancan. Porque el marco de valores ha de ser nuestro principal guía. La suerte no está echada. Siempre que haya proyecto, habrá esperanza.

miércoles, 23 de junio de 2010

Tirón de orejas… constructivo

Hoy, mientras que el presidente del Gobierno se somete a su enésima sesión de control durante su legislatura, pienso que quizá sería más útil si esta fuera trasladada al ciberespacio. En este, el tema sería diferente, los discursos-comentarios animarían el cotarro, tal y como sucede en facebook o en twitter. Me pregunto que pasaría si lo mismo hubiera sucedido con algunas de las aprobaciones legislativas. Un poner… La ley ómnibus. Propongo un diputado: Carlos Lluch. Este experto en seguros aborda, en una de sus colaboraciones en Internet, esta norma desde distintos enfoques. El primero al que se refiere es el de los profesionales colegiados. Lluch nos tira de las orejas (constructivamente hablando): «Los colegios tendrán que espabilar. Deberán pasar de ser una institución acartonada con clientes cautivos a organizaciones modernas, tecnificadas, orientadas al consumidor por encima de intereses corporativistas y deberán atender todo desde una Ventanilla Única». Hasta aquí, el tirón de orejas y a partir de aquí lo constructivo: «En este sentido se abre una gran oportunidad para la mejora de las instituciones colegiales que puede conducir a beneficios hasta ahora inexistentes». Amigo mío, en eso estamos y a eso aspiramos.

martes, 22 de junio de 2010

Traduciendo objetivos

Durante la Presidencia española de la Unión Europea se ha querido dar un papel especialmente destacado a la cooperación para el desarrollo. Sin embargo, la Secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Soraya Rodríguez, manifestaba el pasado martes 15 de junio en un desayuno organizado por Nueva Economía Fórum un dato que resulta preocupante: «solo el 5% de los europeos conoce los Objetivos del Milenio».

Quizá parte de la solución sea, tal y como apoyaba la Secretaria de Estado, trasladar el lenguaje y la terminología utilizada por los responsables de las políticas de cooperación a los ciudadanos. Hablar en términos claros e inequívocos, “adecuar nuestro lenguaje a un nivel más comprensivo para la sociedad, para que sepa y comprenda lo que hacemos”, decía Soraya Rodríguez. En mi opinión ese es tan solo un primer paso. Es necesario concienciar a la población de la urgencia de poner en práctica medidas concretas. Trasladar la necesidad de que la sociedad civil se involucre de forma activa en materia de solidaridad, colabore y realice todos los esfuerzos que sean precisos a fin de ayudar a quienes más lo necesitan.

Un buen ejemplo del imprescindible papel que los profesionales, como sector esencial de la sociedad civil organizada, pueden jugar en esta materia nos lo trae hoy Esther con la segunda entrega del programa Profesiones sin Fronteras, en esta ocasión de la mano de la ONG Ingenieros sin Fronteras:

jueves, 17 de junio de 2010

Recetas para el presente: cooperación y transparencia

«Las empresas deben saber cuándo cooperan y cuándo compiten en relación al presente de la crisis ». Tal afirmación pertenece a Juan Gascón, director de Contenidos Digitales e I+D+i de AETIC, y fue pronunciada en el II Congreso europeo de Estrategias para el desarrollo del Espacio Digital Europeo (gracias, Eli, por rescatarla). En estos momentos, creo que la cooperación se muestra indispensable pero no solo entre las empresas sino también entre otros agentes. Precisamente, a ello hacía alusión Jordi Sevilla, ex ministro de Administraciones Públicas, ayer en el almuerzo de la Red Española del Pacto Mundial. A la hora de hacer frente a los problemas actuales, dice Sevilla, «hay que buscar un nuevo pacto entre lo público y lo privado, entre las administraciones públicas y las empresas, porque ambas partes se necesitan mutuamente». Y lo mismo es aplicable a las posibles soluciones a la crisis o, como dice Sevilla, a las 4 crisis que España padece en estos momentos: de productividad, financiera, de competitividad y ecológica.

Al hablar sobre la crisis de competitividad, Jordi Sevilla se refirió al proceso de desoccidentalización que está experimentando el mundo, para poner de manifiesto que no podemos competir por hacer las cosas más baratas, como ocurría hasta ahora según el modelo productivo que teníamos, sino por hacerlas mejor. Y, en esta nueva forma de actuar, se consolidan como protagonistas la innovación, el talento, la responsabilidad y, por qué no, la transparencia, concepto este especialmente reforzado por los escándalos de corrupción a los que hemos asistido en los últimos años. Las organizaciones deben rendir cuentas ante la sociedad, es decir, mostrar lo que están haciendo, para mantener su legitimidad o seguir siendo la compañía elegida por los consumidores. Motivos aparte, lo cierto es que cada vez se exige una mayor transparencia por parte de todos los agentes, algo que me parece más que acertado.

Precisamente con este objetivo publicamos en Unión Profesional nuestra memoria anual de actividades que esta semana era lanzada por fin a la Red en formato electrónico. En papel o en html, con diseño o sin él, considero que las memorias son un instrumento que fomenta la transparencia y para el que la cooperación, en esta ocasión interna, vuelve a erigirse como... INDISPENSABLE.

miércoles, 16 de junio de 2010

La voz de la conciencia

Tan solo cinco días después de que los economistas solicitaran que no se penalizara a las empresas que aplazan sus pagos a la administración, este mismo sector profesional ha hecho pública una declaración ante el actual panorama económico y social.

[Un kit-kat: La palabra ‘panorama’ siempre me recuerda la expresión que muchas veces utiliza mi madre, Vaya panorama que tenemos!. Perfectamente acorde con la situación del momento. Chapó por la elección]

Este sector profesional entra en harina desde el inicio de su escrito, apelando a la «responsabilidad del conjunto de los directivos y responsables políticos de las administraciones públicas y al tupido entramado de las mismas, para que elaboren urgentemente una hoja de ruta global, realista», y añaden, « y no por entregas, como hasta ahora se viene haciendo en el mejor de los casos». Los economistas dicen que es fundamental que el modelo de organización de las administraciones públicas sea coherente con las circunstancias actuales y con los retos futuros y por eso aconsejan que «si es necesario, realice su ajuste estructural de igual manera que lo ha tenido que hacer el sector privado».

Lo que se escucha, perdón, lo que se lee, es la transcripción de la voz de la conciencia (de la Administración), porque es hora de pronunciarse, aunque no guste. Nos consta. Pero la conciencia es lo que tiene, que se pronuncia justo cuando debe, no cuando puede.

martes, 15 de junio de 2010

¿Qué se nos está escapando?

Vientos de cambio en el entorno de los medios de comunicación. Las nuevas tecnologías -ese cajón de-sastre donde todo es nuevo y tecnológico, pero en el largo plazo, ad eternum- lejos de ser las salvadoras de la prensa, parecen estar concentrando esta tormenta perfecta que tiene desorientado a todo el mundo. Ante el chaparrón, el estímulo está en el experimento, pero sin dejar de lado la tradición. Lo dijo Fernando González-Urbaneja en la jornada de la APD titulada Mass Media: concentraciones y competencia ante un mundo multimedia. El cambio tecnológico -Internet- que democratizó el mercado de la información, irónicamente, acentuó el poder de marca del periodista, su credibilidad, comentó el presidente de la Asociación de la Prensa de Madrid. «El futuro del periodismo está en su pasado» matizó, parafraseando a Juan Antonio Giner. Porque «hay que contar lo que ocurre y contarlo bien» y, de paso, evitar volvernos «cinéticos» con tanto cambio. Esta última reflexión, extraída del ensayo La audacia de la esperanza, del presidente Obama, me saca una sonrisa. Cierto es que la velocidad nos puede hacer perder la perspectiva, pero la cultura de la innovación también ha de ejercitarse. Las raíces, cuanto más profundas, más sabias, de acuerdo, pero ello no quita que queramos mejores soluciones salinas para crecer fuertes y sanos. En la medida, en el punto exacto entre pasado y futuro, está el presente. No obstante, no debemos dejar de arriesgarnos. El que no falla, no aprende. Y la tecnología es muy rápida. Si no nos damos cuenta de que cualquiera con un twitter tiene capacidad de influir, aunque no sea un periodista, tal y como apuntó en esa misma jornada Gumersindo Lafuente, algo se nos estará escapando.

viernes, 11 de junio de 2010

Profesiones 125


El nuevo número de la revista Profesiones ya está en la red, tanto en Issuu como en su página web. En las páginas de este número 125 podréis encontrar un interesante artículo firmado por el sociólogo y habitual colaborador de El País, Enrique Gil Calvo, titulado Alguien en quien confiar. También os enlazamos por aquí el artículo de María Borrego España-Heredia, especialista en Riesgos Profesionales de Marsh, Libertad vs. seguridad. Por su parte, el presidente de Unión Profesional, Carlos Carnicer, reflexiona sobre la crisis y la futura reforma de los Colegios Profesionales en la tribuna Perseverar ante la crisis. Pero no os vayáis, que aún hay más. Los fieles a nuestras dos series -Mundo Rural y Profesionales made by Spain- tienen dos nuevos capítulos: trabajadores sociales y farmacéuticos. Nuestro reportaje de centrales en esta ocasión aborda el tema de la civilización empática como solución de futuro, siguiendo un poco el hilo del último libro de Jeremy Rifkin. También podéis encontrar la entrevista completa a Enrique Dans que ya os anunciamos hace un tiempo, además de invitaros a daros un paseo interesante por la actualidad cultural en nuestra sección más versátil.

Como lluvia fina...

Dicen los expertos que la Responsabilidad Social (RS) debe calar en las organizaciones como lluvia fina. Pues con la lluvia y la RS estuve precisamente antes de ayer liada toda la mañana, empapándome de ambas. Como lo de la lluvia no genera demasiada polémica (más allá de lo que nos pueda parecer, a más de uno, un tiempo de locos), me gustaría hablaros de la iniciativa que acaba de lanzar la Asociación de Directivos de Comunicación (Dircom) que se une a las múltiples acciones puestas en marcha, sobre todo en los últimos tiempos, para el fomento de la Responsabilidad Social. Es el Manifiesto por una Sociedad Responsable, un documento donde se hace alusión a la necesidad de que TODOS admitamos nuestra responsabilidad.

Se ha considerado durante mucho tiempo que la Responsabilidad Social es algo propio de las empresas pero no es así (al menos, no del todo). Por supuesto que ellas deben asumirla (en mucho casos, si no quieren perder su licencia para operar) pero el resto de organizaciones y la Administración Pública también. Seguro que Gürtel, Ballena Blanca y demás casos de corrupción que han saltado a la palestra no hubieran ocupado nuestros juzgados si esa idea de responsabilidad hubiera empapado en todas y cada una de las instituciones y, por qué no, en todos y cada uno de los individuos. Como lluvia fina.

miércoles, 9 de junio de 2010

Construyendo puentes

Una vez más se pone de relieve la importancia de llevar a cabo técnicas de internacionalización para adaptarse a las necesidades del mundo actual. Me baso al decir esto en una noticia que nos vino dada ayer en el diario Expansión: el Ilustre Colegio de Abogados de Barcelona (ICAB) ha puesto en marcha, por cuarto año consecutivo, el denominado business bridge. La iniciativa ha consistido en poner en contacto a sus colegiados con la abogacía brasileña. En efecto, «el ICAB ha llevado a sus abogados a Brasil» con el objetivo de que estos «hagan contactos con letrados y empresarios americanos y así encuentren socios, accedan a oportunidades de negocio y amplíen sus clientes». Creo que no hace falta decir que ha sido todo un éxito.

Pero los proyectos del ICAB van a más. Convencidos de la necesidad de establecer redes de networking a nivel internacional, en febrero de 2011 organizarán una feria internacional de abogacía en la que los bufetes de la ciudad condal se podrán relacionar con sus homólogos europeos y mediterráneos, estableciendo con ello «vínculos de colaboración profesional, corresponsalías, alianzas estratégicas, etcétera». Un gran paso para lo que, confío, sea el inicio de una apuesta continua por la internacionalización.

martes, 8 de junio de 2010

En busca y captura de profesionales proactivos

Uno de los usos del prefijo ‘pro’ es la indicación de delante de, como en la palabra (pró)logo. Quizá este uso sea el que más se adecue al tema tratado en el último Escuela de Gestión y Liderazgo, pues está dedicado a la proactividad. Así lo indica nuestra invitada, Eva Ferrer, de Everis, para quien «alguien proactivo es capaz de prever, de anticipar problemas y sobre todo de emprender acciones que los mitiguen».

Junto a José María Gasalla, Eva ofrece las fórmulas mágicas para descubrir y captar a los profesionales proactivos, «aquellos que buscan nuevas formas de mejorar los procesos y su trabajo». ¿Dónde? Pues, muy próximos al éxito profesional. Si yo fuera tú, no me lo perdería…

viernes, 4 de junio de 2010

Día Mundial del Medio Ambiente

Como una imagen vale más que mil palabras, os invito a hacer clic sobre el video que incluyo en este post y deleitaros con la extraordinaria belleza de una naturaleza en estado puro que es la que ofrece el documental 'Océanos' (ya en cines). Seguro que después de ver este trailer os apetecerá aún más ver la película entera. Buen plan para este sábado, 5 de junio, día en que el mundo entero celebra el Día Mundial del Medio Ambiente.

No obstante, para aquellos que prefieran dedicar su tiempo a acudir a la Feria del Libro de Madrid (donde, por cierto, también han hecho su huequito particular para hablar sobre biodiversidad) o tengan otros planes, no os apuréis porque supongo que esta película la mantendrán algún tiempo en cartelera ya que este año celebramos también el Año Internacional de la Biodiversidad. Todo para concienciarnos de la necesidad de salvaguardar la rica diversidad biológica de nuestro planeta. ¿Lo conseguiremos algún día?