Sin embargo no todo el túnel es tan oscuro, ya que nuestro país sostiene el liderazgo en acceso de empresas de 10 o más empleados a través de banda ancha. Muchas han sido las pequeñas empresas que se han lanzado a la aventura de las redes sociales, concretamente de twitter: cada vez más negocios aprovechan las redes sociales y bitácoras digitales para ganar notoriedad de marca en la web y atender y fidelizar a sus clientes, cuentan desde Cinco Días.
El mensaje pues, está claro: mirarse el ombligo demasiado tiempo seguido impide darnos cuenta de lo que le sucede a nuestro vecino en el suyo. Puede ser que España sea así pero no tiene porque seguir siéndolo... eternamente.
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