Lo veníamos barruntando y es cada vez más evidente, en los propios medios de comunicación, que toca definir el modelo de gestión de los colegios profesionales. ¿Cómo vamos a trabajar a partir del día después de la reforma? De acuerdo en que existen muchos aspectos trascendentes por aclarar, como la colegiación o el visado obligatorios, pero tenemos que decidir ya qué queremos ser de mayores… Hoy hemos leído dos tribunas que tocan el tema. Me refiero a la columna de Rafael del Rosal en Expansión y a la de Gonzalo Múzquiz en la Gaceta de los Negocios. Ambos hablan de gestión (y estrategia) de los colegios.
Rafael del Rosal reivindica el papel del colegio institución frente al del colegio servicios que parece imponerse en el discurso general y que no le gusta porque mercantiliza las instituciones colegiales. Creo que esta cuestión es de lo más oportuna. No se si se trata de dirimir entre un hipotético modelo a (colegio institución) y un hipotético modelo b (colegio servicios) o si, más bien, hemos de ser capaces de integrar el modelo b en el a. Sea como sea, es AHORA…
Gonzalo Múzquiz se asoma a ese día después de la reforma. En ese escenario post-reformado hay variables como la ventanilla única que, por sí solas, cambian radicalmente muchos de los procesos internos que viven hoy las instituciones colegiales. Por eso la clave está en ser capaces de gestionar un cambio que llega en plena incertidumbre.
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