Diario de … un falso profesional

A principios de semana saltaba la noticia sobre la detención de un falso médico que durante 20 años diagnosticó, recetó e incluso operó. La indignación de sus víctimas y el periodismo de investigación de ‘Diario de…’ lograban por fin desenmascarar a este pseudo-profesional.

Por desgracia, este no es el único caso que en los últimos años ha copado ediciones de prensa y aunque casi siempre tiene que ver con el ámbito sanitario, parece necesario contar con las herramientas suficientes para hacer frente al cada vez más extendido intrusismo profesional. Lástima que en estos últimos tiempos se dude en reconocer como una de dichas herramientas a los colegios profesionales, pues suelen ser los primeros en detectar y hacer público este tipo de prácticas fraudulentas.

Así, ha sucedido con los falsos dentistas que fueron descubiertos por el Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de Murcia, quienes ‘atendían’ a sus pacientes a los que tumbaban en una hamaca, en bañador y chanclas. En esta misma línea, el pasado año, desde la entidad nacional de fisioterapeutas, así como desde algunos de sus colegios provinciales clamaban en contra de los ‘masajistas de verano’, que a pie de ola, prometían relax a cambio de unos cuantos euros.

Ante tanto despropósito, alguien debe velar por el consumidor, usuario, paciente o cliente. En ningún momento mejor como el que estamos viviendo en los colegios profesionales para sentirnos garantes y vigilantes del servicio profesional. En ningún momento mejor como el que estamos viviendo en los colegios profesionales para sentirnos ‘parte contratante’, como diría Groucho Marx, de Diario de… a cuyo equipo agradecemos su riguroso trabajo y su eficaz resultado.