Pocas leyes han sido capaces de producir tanta litigiosidad en los tribunales como las leyes de propiedad horizontal y arrendamientos urbanos, necesitando éstos de sistemas alternativos para solucionar los conflictos. La justicia debe adecuarse al siglo XXI aludiendo, directamente, a la mediación, e indicando que la actuación jurisdiccional debe ser el último recurso. Por ello, los Administradores de Fincas Colegiados fomentamos la cultura de la Mediación y el Arbitraje en el sector inmobiliario, y estamos trabajando para que estas alternativas queden pactadas, antes de surgir los conflictos, en los Estatutos de las Comunidades de Propietarios -caso de la Propiedad Horizontal- o en el contrato -caso de los Arrendamientos Urbanos-.
También reivindicamos, en materia de vivienda, una tutela procesal arbitral adecuada por parte de la Administración, con procedimientos especiales y gratuitos para el ciudadano, subvencionados económicamente por la Administración estatal o autonómica, y con especial atención al arbitraje de equidad, otorgando la tutela de dichos arbitrajes a los Colegios Profesionales de Administradores de Fincas, cuyos profesionales son expertos en la materia.
Con ello pretendemos resolver, de una manera ágil, económica y sin secuelas, los problemas que se generan en el día a día del ciudadano y respecto a sus inmuebles, ofreciendo, como colectivo profesional, un servicio a la sociedad, que es uno de los objetivos fundamentales de los Administradores de Fincas Colegiados.
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