Objetivo: mejorar las oportunidades y las condiciones de empleo

Mientras que en Valladolid se hablaba sobre la Educación y la Psicología, la sede del Imserso en Madrid acogía ayer la Jornada sobre ‘Políticas activas de empleo y buenas prácticas en la selección de personal’, organizada por el Colegio de Psicólogos de Madrid y en la que se dieron cita diferentes agentes políticos, sociales y económicos de nuestro país. En sendas mesas redondas y conferencias, expertos procedentes del ministerio de Trabajo, de CEOE, de universidades, de asociaciones relacionadas con la recolocación, sindicatos, empresas, fundaciones y del Consejo General de Psicólogos y del propio Colegio organizador, debatieron sobre las políticas activas que deben ponerse en marcha para la creación de empleo.

Porque de lo que se trata es de mejorar las oportunidades de empleo de nuestro país pero también las condiciones de trabajo. Precisamente para hablar sobre la mejora de las relaciones laborales acudía Juan José Barrera, director general de Economía Social, del Trabajo Autónomo y la Responsabilidad Social del Ministerio de Trabajo e Inmigración, cuya presencia en la sala coincidía con el día en que la Ley de Economía Social era publicada en el Boletín Oficial del Estado, hecho que destacó el propio director. Pero su intención no era hablar de esta ley, como él mismo reconoció, sino de la Ley de Economía Sostenible, cuyo Art. 39 está dedicado a la promoción de la Responsabilidad Social en las empresas pero que también debe estar presente en todas las estructuras organizativas de la sociedad civil. Entre los múltiples objetivos de la Responsabilidad Social (entre los que se encuentran la transparencia en la gestión, el buen gobierno corporativo, el compromiso con lo local y el medio ambiente, el respeto de los derechos humanos, la igualdad de oportunidades, etcétera), Barrera centró la atención (por perfecta adecuación a la temática de la jornada) en la mejora de las relaciones laborales, para lo que cobran especial relevancia aspectos como:

• La igualdad de género


• La conciliación de la vida laboral y familiar


• El apoyo a la inserción laboral de personas con discapacidad y excluidos sociales


• La reducción de la precariedad en el empleo


• El apoyo a la empleabilidad a través del estímulo a la formación continua de los trabajadores y de planes sociales, recolocación y compromiso con lo local.

Pero, como señaló Barrera, no es solo una cuestión del departamento de Recursos Humanos, sino que «todos tenemos que aportar y participar en este ámbito».