Todo el mundo coincide (y mira que es difícil eso de «coincidir») en que la salud es importante pero creo que no todas las entidades son conscientes de la relevancia de una buena salud organizacional.
Justo sobre este tema fueron las jornadas Corresponsables que la editorial MediaResponsable organizó ayer, 14 de mayo, en Barcelona bajo el título «El valor de una organización saludable». 15 ponentes y más de 150 asistentes debatieron sobre aspectos esenciales tanto para nuestra vida como para cualquier organización. Estamos hablando de prevenir riesgos laborales, evaluar los riesgos psicosociales, fomentar campañas de alimentación saludable, reducir la siniestralidad en las carreteras, facilitar el acceso universal a los medicamentos, combatir el cambio climático, favorecer la conciliación de los empleados, promover hábitos de vida saludables, garantizar la calidad de la asistencia sanitaria, luchar contra el tabaquismo, la obesidad, etcétera.
Sí, ya sé que estos aspectos, que se engloban dentro de lo denominado como ‘Salud Responsable’, no vienen en las leyes y, por tanto, no hay una obligación explícita de cumplirlos pero ello no debe ser óbice para no hacerlo sino al contrario. La gracia de este asunto, ignorada desde mi punto de vista por muchas organizaciones de nuestro país, está en que si los cumples y vas más allá de la ley en aspectos como estos, tarde o temprano, la organización se verá recompensada y más aún en periodos de crisis como el que vivimos y con una sociedad cada vez más concienciada en estos temas. O al menos en eso confío.
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